Como el libro que estoy leyendo no tiene página 161 (acaba justito en la página 160), copio el párrafo correspondiente de la página que estoy leyendo ahora (copio dos porque me gustó):
La pasión atraviesa la subjetividad del hombre de tal modo que cuando se entra en ella ya no se vuelve a ser el mismo. La pasión es completud e incompletud. Seguridad e inseguridad. Goce y sufrimiento. La pasión, como la libertad, como el amor, existe sin "el por qué". La razón necesita del "por qué" y del "para qué" y del "cómo"; pero la pasión contiene y excede la razón como fidelidad al deseo.
Por eso es inútil hacer una crítica, llamémosla "ética", a aquellos luchadores que han "pasado a retiro", que no militan más (...) A quien no milita politicamente es inútil decirle "aburguesado", "quebrado", "reformista", o qué se yo cuántos epítetos típicos del patoterismo de izquierda o populista. Porque este hombre, con su razón puesta en el tiempo mesiánico de espera, ha perdido la pasión. Y la tenencia o no tenencia de pasión no es un simple acto de voluntad. Por el contrario, el acto de voluntad está impulsado por la pasión. Criticar así es lo mismo que la esposa (o el amante) que le reprocha al marido (o a la amante): "ya no me querés más", como si amar fuese un acto de voluntad.
El encatamiento político
Luis Mattini
pag. 36
8 Comments:
Viniendo de Mattini no es un tema menor
En una epoca cualquier abandono de la pasión, cualquier "quiebre" era considerado traición y era peligroso
claaaro... tengo un libro de ana longoni que habla sobre el tema de la traición(ella da ejemplos de cómo se ve a través de la literatura argentina). Muy buena hipótesis. Cuenta cómo los que sobrevivieron son muchas veces vistos como traidores, porque seguro habían quebrado/delatado, y entonces quedan estigmatizados para toda la vida. Más allá de los casos en que sí habían quebrado, habla de la situación en que se lleva a una persona al quiebre...
Muy buen extracto... interesante para pensar antes de hablar
besos!
Siguiendo con lo de la trición, creo que la más peligrosa de todas es la que se le comete al destino.
Como la de un sobreviviente de un accidente aéreo. Un maestro de la traición; un gambeteador de lo inevitable.
Y claro, seguro es visto como un delator, un delator que "algo" sabe y se lo murmura al Diablo en el oído para que éste le perdone la vida.
Seguramente así fue visto Paganini, al interpretar su música en el violín.
Salú!
Buen blog :D
me seguire pasando por aquí si no te importa.
besos.
problema... "La pasión atraviesa la subjetividad del hombre"... no les suena a que es algo externo al ser y no propio y esencial del hombre?
sin pasion, por algo... el hombre no existe. Es solo un ente sin realizacion en ser.
El autor menciona a la pasión/emoción. Esa que –también- se sabe hacer tan amiga de los dogmas. Por eso se mezcla tan bien con la política y la religión. O el fútbol, entre otros.
Jugando con las ideas; ¿Puede haber una pasión/razón? Si la pasión es vehemencia y la vehemencia con emoción se sostiene, creo que se puede dejar a la razón como faro inexcusable y canalizar a la pasión útilmente en tanto y en cuanto pueda conducirse con fidelidad hacia esa luz.
Entonces la pasión puede acunarse en la verdad demostrable con evidencias, desestimando todo lo demás y esto –por supuesto- destruye los dogmas que estancan y luego hieden. Por supuesto, sería la verdad obtenida a través de la razón, a veces antipática pero fiel.
¿Hay ejemplos prácticos de ese tipo de pasión/razón? Bueno, aquellos que buscan el saber en las ciencias lo son, aunque no estén exentos a veces de la pasión/emoción.
La pasión emoción es o no es. O mejor dicho, o es amante o traidor. O pío o infiel. O boca o river. Etcétera.
La pasión razón es silogismo lógico o no lo es. O mejor dicho, es escéptico hasta las evidencias, es pragmático antes que fanático, es crítico y es autocrítico para crecer, para modificarse en búsqueda de esa guía mencionada.
Muchas veces ambas pasiones han estado –y están- enfrentadas. La pasión/emoción gana con las masas. La pasión/razón gana con muy poquita gente que –a veces- intenta convencer –en general bastante tarde- de que sin ser la más bonita es la que –al final- resulta.
A la gente mayor a veces la experiencia le hace ver más allá de las emociones monolíticas y poner en perspectiva lo que se declama, de los resultados. No es raro que –si no hay intereses particulares- se tienda entonces a no ser tan categórico con lo que dicen. A la juventud suele disgustarle e impacientarle las sutilezas, cuando el blanco y negro es más simple y directo. Por eso siempre han sido la primera fila en el frente de todos los enfrentamientos, mientras que los que los manipulan peinan canas escribiendo el guión convincente de estas emociones.
Por supuesto, también hay pasiones por actividades que son casi emoción pura y en que la razón sólo presta sus habilidades prácticas, que ayudan para lo sublime. Como la pasión por la música o la pintura. Pero también podemos acusarle el eclecticismo de quienes no se casan con un sólo estilo, por lo que le sacamos los grilletes de lo ortodoxo, al menos donde hay libertad de expresión.
Saludos con pasión no dogmática.
Attón.
pitu!! venga, venga pronto!!
agustín, ya le dije que se fue a la mierda. jejeje (ah, y para los que ya no queremos creer en el destino, qué? qué, qué?)
Rosa, obvio que me importa. Bienvenida!
Perse, no me había dado cuenta!! suena así!!! Es como la imagen de los enamorados a los que les llega la flecha de cupido. Fulminante. Ahora, Matinni le diría que el hombre sin pasión puede existir (aunque tal vez le diga que "sobrevive" o alguno de esos grises).
Atonn, para matinni no. Ahí lo dice. Una cosa es una cosa y otra cosa es otra cosa (es re panigassi este matinni!). Usté lo quiere volver loco! como va a decir que las dos en una pueden ser la misma cosa? Para mi, que estoy más panigassi, conviven, no se anulan, pero tampoco se unifican. Salú!
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