Hacerse cargo
Es aceptar que no podés con todo,
es entender que sos irremediablemente humana,
es observar tus extremos y apenas alcanzar la orilla
aunque sea tu orilla.
O sea, dejo de escribir por unos días
hasta que regrese el tiempo para volver
a respirar
por estos pagos.
No es que abandono. Estoy blanqueando
lo que de hecho sucede
y que, de hecho,
es del mismo color
que la luz.